31 agosto 2007

No pudo ser

El Sevilla no pudo vencer en la final de la Supercopa de Europa ante el campeón de la Liga de Campeones el Milan, en una final claramente marcada por el trágico fallecimiento el pasado martes de Puerta, un Puerta que sin ninguna duda estuvo en la final, en las camisetas de los dos equipos, en las aficiones y en el cielo de Mónaco dando ánimos a su equipo.
El Sevilla salto al terreno de juego con muchas ganas, ganas por conseguir el 6 título en 15 meses, ganas por reeditar la Supercopa, y sobre todo ganas de dedicársela a Antonio, con esas ganas y empuje consiguió adelantarse en el marcador tras un saque de esquina pasado que libre de marca remato Renato, Dida no pudo blocar y el balón se colaba en la portería, el Sevilla en bloque señalando al cielo dedico el gol a Puerta.
Poco a poco el Sevilla se fue echando atrás y el Milan comenzaba a desplegar su juego ese juego que le dio la pasada Champions, en una contra el Sevilla estuvo apunto de sentenciar el partido Kanoute que regatea al portero, balón atrás y Renato que por no empalmarla según le viene se entretiene controlándola y se la acaba sacando bajo la línea Nesta.
El Sevilla se encontraba cada vez mas cansado físicamente sobre el terreno de juego, un Sevilla que ha vivido unas ultimas horas muy intensas, conseguía aguantar el 1-0 al descanso pero en la segunda parte, ese cansancio se acentuó y el Milan comenzó a crear cada vez mas y mas peligro hasta que tras un centro desde la derecha de Gattuso minutos antes de que tuviera que retirarse por un choque con Keita, que Inzagui solo, remataba con la cabeza a gol.
Tan solo 7 minutos después del empate, el mazazo definitivo para el Sevilla, Jankulovski enganchaba una volea y la cruzaba al palo largo de Palop que no podía hacer nada para detener el balón.
El Sevilla se encontraba totalmente agotado y sin fuerzas, para poder empatar, ya en el 87 Kaká sentenciaba empujando a la red el rechace de un penalti que el mismo disparo y Palop atajo con la cara con tan mala suerte que el rechace le fue a la cabeza del brasileño. Un gol que Kaká señalándose a la parte inferior de su camiseta donde todos los futbolistas llevaban escrito el nombre de Puerta, le dedicaba el gol.
Una pena para el Sevilla que se vio superado físicamente por el Milan, en otras circunstancias seguro que hubiésemos visto otro partido.
No quiero cerrar este articulo sin darles un 10 a los aficionados del Milan y Sevilla por su comportamiento, y a los jugadores del Milan por portarse como auténticos señores.

Resumen Milan 3 - 1 Sevilla

1 Comentario:

Alvaro dijo...

Una lástima. Lo más bonito, los gestos de Seedorf y Kaka'.

Saludos.